Pensaba que te conocía, pensaba que nos habíamos tocado, que nos habíamos besado y hasta pensé que hicimos el amor.
Pero nos han congelado el tiempo.
Y también a nosotros.
A ti más que a mi.
Ahora es un buen momento para encenderme un cigarrillo, darle vueltas a esta cabeza que gira sin cesar.
Meterme en estas sábanas que siguen sedientas por conocerte, beber un buen vino hasta saltar de locura y acabar retorciéndonos con anécdotas en la alfombra grisácea que tanto me gusta.
Ahora sería un buen momento para decirte...
Pensé que igual querrías saberlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario